Este verano se estrena la película sobre la vida de Steve Jobs, cofundador de Apple y calificado por muchos como gran visionario de la tecnología. Entre las muchas cosas que la película debería mostrar es la relación entre Jobs y el otro gran gigante de la informática, Bill Gates.
Mucho se ha hablado de si ambos se llevaban bien o mal. En principio y como resumen, según explica Andy Hertzfield, antiguo empleado de Apple, a Walter Isaacson, biógrafo de Jobs, “Cada uno pensaba que era más inteligente que el otro, Steve trataba generalmente a Bill como alguien ligeramente inferior, especialmente en cuestiones de gusto y estilo. Por su parte, Bill miraba por encima a Steve porque éste no sabía realmente programar”. Esta opinión se ve demostrada con algunas frases dichas por Gates y Jobs a lo largo de los años.
Así, Bill Gates declaró en una entrevista tras la muerte de Jobs que “Realmente él nunca supo mucho sobre tecnología, pero tenía un asombroso instinto para saber qué era lo que funcionaba”.
La falta de conocimiento tecnológico fue un arma utilizada por Gates cuando quiso interponerse en la compra de la compañía NeXT Computer (empresa fundada por Jobs en 1985 cuando le echaron de Apple) por parte de Apple en 1996. Steve Jobs estaba aconsejando dicha compra al entonces CEO de Apple, Gil Amelio, para que el sistema operativo NeXTSTEP fuera la base de los futuros ordenadores Mac. Gates veía un error esa operación y así se lo dijo a Amelio:
“¿Realmente piensas que Steve Jobs tiene algo ahí? Conozco su tecnología, no es nada más que una versión recalentada de UNIX y nunca conseguiréis hacerlo funcionar en vuestras máquinas. ¿No comprendes que Steve no sabe nada de tecnología? Él es sólo un súper vendedor. No puedo creer que vayas a tomar una decisión tan estúpida… Él no sabe nada sobre ingeniería y el 99% de lo que dice y piensa está equivocado. ¿Para qué demonios estás comprando esa basura?”
Finalmente Apple compró NeXT en diciembre de 1996 y el sistema operativo NeXTSTEP fue la base del futuro MacOS X… dejando a Gates sin su objetivo de que los Mac fueran con una versión de su Windows NT.
Steve Jobs tampoco tenía palabras amables sobre Gates en muchas ocasiones. Le veía como un tipo muy estirado, sin imaginación y que robaba ideas a otros.
Así, comentaba que Gates sería “más tolerante si hubiera tomado ácido o ido a alguna fiesta hippy cuando era más joven”. O este comentario cuando se retiró de la dirección de Microsoft: “Bill Gates básicamente no tiene imaginación y nunca ha inventado nada, es por lo que pienso que él ahora está más cómodo en el mundo de la filantropía que en el de la tecnología”.
Otro punto de fricción entre los dos fue el tema de los entornos cerrados. En este terreno, Gates dijo sobre la política de Apple “El modelo integrado (de Apple) funciona bien mientras Jobs está al mando. Pero eso no quiere decir que vaya a ganar siempre en el futuro”. A lo que Jobs replicó “Por supuesto, el modelo fragmentado (de Microsoft) funcionaba, pero no produce realmente grandes productos. (Ese modelo) crea productos de mierda.”
Sin embargo, pese a todas estas frases, se puede observar que con el tiempo fueron mostrando cierto respeto y admiración por el otro, especialmente Gates. En un par de correos internos, Gates dijo: “La habilidad de Steve Jobs para centrarse en un par de cosas importantes, llevar a la gente el interfaz de usuario correcto y vender cosas como revolucionarias es realmente asombrosa”. En uno referido al iPod, decía: “Creo que necesitamos un plan para demostrar que, a pesar de que Jobs nos ha pillados un poco desprevenidos otra vez, podemos movernos rápido, igualarlo e incluso hacer cosas mejores”. Como sabemos, no consiguieron hacerlo, al menos con Zune.
Ya en público, Gates reconoció delante de Jobs en una entrevista en la conferencia D5 de 2007 que “Lo daría todo por tener el gusto de Jobs”, y en otra declaración dijo: “La forma en que (Jobs) hace las cosas es diferente y creo que es mágico.”
Encontrar declaraciones generosa de Jobs sobre Gates es más difícil (ya sabemos que la generosidad no era una de las virtudes de Jobs), pero sí que en cierta ocasión declaró que, pese a que Gates era un hombre de negocios y no de productos, “yo le admiro por la empresa que construyó, que es impresionante, y disfruté trabajando con él. Es brillante y tiene realmente un gran sentido del humor”.
Aunque en la biografía de Jobs aparecían algunos ataques contra Gates y sobre todo contra Microsoft, Bill Gates no respondió y le quitó importancia. Hace unos meses, Gates explicaba en una entrevista que visitó a Jobs durante los últimos meses de su enfermedad y que charlaban como dos buenos amigos sobre su trayectoria, lo poco (aún) que habían hecho por mejorar la educación con la tecnología y sobre el barco que estaba diseñando y fabricando Jobs.
No cabe duda que durante los más de 30 años en que Gates y Jobs coincidieron hubo de todo, pero al final se ve cierto respeto mutuo y admiración por los puntos fuertes que cada uno tenía. Son dos genios que, cada uno a su estilo, han marcado el devenir de la tecnología en los últimos 30 años… habrá que ver quiénes son sus sustitutos en los próximos 30…
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